domingo, 21 de agosto de 2011

el bufòn

Las preguntas de este tipo constan de un enunciado y de cuatro posibilidades de respuesta, entre las cuales usted debe escoger la que considere correcta.
 RESPONDA LAS PREGUNTAS 1 A 15 TENIENDO EN CUENTA LOS SIGUIENTES TEXTOS
 EL BUFÓN
En el bufón se manifiestan las asnadas y las locuras que el común de las gentes disimula porque son incompatibles con la estructura de la persona. Al hacerse cargo de nuestra recóndita insensatez, a la cual no osamos dar expresión por el temor de quedar en ridículo, el bufón se convierte en una figura representativa. Su retribución consiste en el permiso de cantarnos impunemente cuatro verdades y dar palmetazos a los grandes. La libertad del bufón es un privilegio inseparable de su función social; no se le debe poner ninguna traba a fin de que pueda representar  sin reticencia la locura del prójimo. En una sociedad bien ordenada, como lo fuera la del Medioevo, correspondía al cargo y a la dignidad del bufón el traje de carácter: el gorro con cascabeles y el jubón de losanges. Vestido así, se sienta a los pies del rey y, hallándose tan cerca de la persona del soberano, se destaca como representante, locum tenens.
El rey y el bufón, los dos extremos de la representación, forman pareja. Más aún. El bufón también es rey a su manera. Los niños lo saben: dondequiera que se asome el loco, corren en pos de él, un séquito ruidoso, cuyas burlas en el fondo son himnos cantados en loor de la realeza. He aquí un par de contrastes rodeados de misterio. Mutuamente se exigen los dos. El rey que en la representación recata su propio ser debe tener al lado al libérrimo personaje oriundo del paraíso de los locos, y sobre él proyecta la sombra de sus secretos delirios. El rey y el bufón son figuras idénticas, si bien invertidas como los reyes de naipes.
(Ernesto Volkening, “Dos figuras arquetípicas de la Edad Media,” en revista Eco, vol. 4, núm. 5, Bogotá, marzo de 1962.)
Pero aun hay más: los reyes y los grandes de la tierra son tan aficionados a mis protegidos, que los llevan a sus palacios, los tienen a su lado, los sientan a su mesa, pasean con ellos, y se sabe de muchos que los prefieren a sus consejeros y a los sabios que, por pura vanidad, mantienen en sus cortes. A nadie puede sorprender el motivo de esta preferencia, pues los sabios, engreídos y llenos de vanidad, no hablan a sus señores más que de cosas tristes y a veces .hieren los oídos delicados con la dureza de sus verdades., mientras que los bufones, en cambio, procuran a quien los mantiene lo que el poderoso busca con especial afán: distracciones, risas, chanzas, buen humor. Téngase además en cuenta que esos graciosos locos poseen una gran cualidad: no ocultan las verdades, son francos y sinceros. Alcibíades dice en el Banquete de Platón que sólo en el vino y en la infancia se encuentra la verdad; pero debió decir que también en la locura, pues mucho del aprecio que por ella se siente débeseme a mí. Es proverbial la afirmación de Eurípides, de que .el loco sólo dice locuras.. Pone el loco sus labios, sus ojos y su corazón de acuerdo para decirla. En cambio, los sabios, según ha dicho el mismo Eurípides, tienen dos lenguas: con una dicen la verdad, con la otra dicen lo que les conviene. Y así vemos que hoy aseguran que es blanco lo que mañana afirman que es negro, con la misma boca soplan lo frío y lo caliente, y nunca se sabe si de verdad creen lo que dicen. Realmente, a pesar de todos los lujos de que disfrutan, los príncipes me parecen en extremo infelices, porque están siempre rodeados de aduladores y nunca escuchan la verdad. Se me objetará que la aborrecen, que si huyen de los sabios es precisamente porque temen encontrarse con alguno que les diga con crudeza lo que tratan de ignorar. Es posible que sea así, que resulte peligroso decir las verdades ante los tronos; pero ved que ese peligro no existe para mis locos: a ellos se les permite decir las cosas más fuertes sin que nadie se escandalice, dándose el caso de que afirmaciones que, dichas por un sabio, llevarían a éste a la horca, pronunciadas por uno de mis protegidos hacen reír y son celebradas como una gracia.
(Erasmo de Róterdam, Elogio de la locura, México, Diana, 1952, pág. 63-64.)
 1. En el texto de Volkening se
A. afirma que el bufón es tan importante como el rey en la sociedad medieval.
B. presenta al bufón como el ser más despreciable dentro de la sociedad medieval.
C. sugiere que el rey es la persona más importante dentro de la sociedad medieval.
D. se propone que el rey es el más grande bufón dentro de la sociedad medieval.
 2. A partir del texto de Volkening se puede inferir, que en la Edad Media,
A. el oficio de bufón lo podía desempeñar  cualquier persona.
B. los reyes no guardaban ningún respeto por los bufones.
C. ser bufón constituía un oficio de gran responsabilidad social.
D. los bufones compartían el poder económico con los reyes.
 3. Según los textos de Volkening y de Erasmo, la función del bufón es provocar
A. dolor.
B vergüenza.
C. risa.
D. sumisión.
 4. En el texto de Volkening se concluye que
A. los extremos se tocan.
B. los privilegios se imponen.
C. la cordura se premia.
D. la locura se castiga.
 5. Las alusiones a la cultura clásica, el estilo y el contenido tratado en el texto de Erasmo de Róterdam, lo ubican como un pensador
A. barroco.
B. romántico.
C. moderno.
D. renacentista.
 6. En el texto de Erasmo de Róterdam los sabios representan la
A. ciencia exacta.
B. justicia divina.
C. cultura oficial.
D. sátira popular.
 7. De acuerdo con Volkening, una función social del bufón, por la cual lo retribuimos, es
A. representar la parte de nosotros mismos que no queremos reconocer en público, actuando así como un desahogo.
B. convencer a la realeza de la necesidad de solucionar la situación económica de sus súbditos.
C. permitir el acceso de la gente del común al conocimiento científico y político en poder de la realeza.
D. servir de puente entre el arte y la ciencia, representando el conocimiento de manera graciosa.
 8. Los textos de Volkening y de Erasmo
A. coinciden en la manera de relacionar la locura con la imagen graciosa del bufón.
B. difieren en la forma como abordan la situación de la monarquía y el bufón.
C. coinciden porque fueron realizados más o menos en la misma época.
D. difieren en la forma como tratan al bufón, relacionándolo con los sabios.
 9. Los textos El bufón y Elogio de la locura participan de una característica interesante, y es que ambos
A. utilizan un lenguaje delicado.
B. citan a los clásicos griegos.
C. tocan el tema en forma de ensayo.
D. pueden intercambiar sus títulos.
 10. En el texto del Volkening, la expresión: “El rey y el bufón son figuras idénticas, si bien invertidas como los reyes de naipes” hace alusión a que, en la compleja condición humana, la
A. locura y la razón son intercambiables y a la vez forman una unidad.
B. razón debe condicionar al hombre y alejarlo de su locura.
C. locura manifiesta la gran opresión social de una época.
D. locura y la razón son antagónicas y a la vez deshacen la unidad.
 11. De acuerdo con el texto de Volkening se puede afirmar que el bufón
A. mantiene las relaciones entre realeza y pueblo.
B. muestra un mundo opuesto a la cultura oficial.
C. se acoge a la sociedad organizada del Medioevo.
D. es reflejo de los adelantos culturales de la época.
12. En el texto de Volkening son complementarios
A. la realidad y el delirio.
B. el sueño y el despertar.
C. la risa y la alegría.
D. la locura y la sensatez.
 13. En el texto de Volkening, la función del bufón consiste en
A. crear presencias donde no hay sino ausencias.
B. enmascararse para desenmascarar al otro.
C. remedar los modales hasta distorsionarlos.
D. representar las virtudes sociales.
 14. Dos personajes similares al rey y al bufón en la literatura universal son
A. Calisto y Melibea.
B. Tristán e Iseo.
C. el ciego y el lazarillo.
D. Romeo y Julieta.
 15. Un personaje de la literatura universal que, al igual que el bufón con el rey, posee privilegios muy similares a los de un príncipe es un
A. verdugo.
B. soldado.
C. criado
D. mendigo.